«He presentado al Senado la solicitud de inicio del procedimiento de objeción. Como hombre de leyes me someto a las reglas» Santiago Nieto Castillo
En Brasil, Odebrecht admitió haber pagado sobornos en varios países de América Latina, incluido México.
El exdirector de Pemex ha sido acusado por tres exdirectivos de la constructora brasileña Odebrecht de haber recibido 10 millones de dólares en sobornos, algunos de ellos durante la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, en la que el Lozoya era jefe de asuntos internacionales.
Nieto Castillo mientras tanto fue destituido por «transgredir» el código de conducta de la Procuraduría General de la República (PGR), según informó esa institución en un comunicado. Luego del anuncio vino una serie de reacciones tanto de partidos de la oposición como del mismo Santiago Nieto, quien este lunes publicó en la red social Twitter que ha presentado al Senado la solicitud de inicio del procedimiento de objeción: «Como hombre de leyes me someto a las reglas».
He presentado al Senado la solicitud de inicio del procedimiento de objeción. Como hombre de leyes me someto a las reglas pic.twitter.com/5Apq1Yx1xz
— Santiago Nieto (@SNietoCastillo) 24 de octubre de 2017
Nieto Castillo había sido designado titular de la Fepade en febrero de 2015, tras haber sido aprobada en 2014 una nueva Ley Federal de Delitos Electorales. Estos cambios, publicó este lunes el diario La Jornada, fueron determinantes para que la Fiscalía se alejara de la subordinación al gobierno, requisito indispensable para que México pudiera llegar a avanzar hacia resultados electorales más creíbles para todos, dentro de una larga tradición de procesos fraudulentos.
«Con independencia de las polémicas suscitadas por la exposición mediática de casos, la Fepade ha cobrado mayor protagonismo en los comicios a partir de su estrategia de blindaje, encaminado a investigar y acotar las prácticas de compra y coacción del sufragio en los procesos locales registrados en los pasados tres años». La Jornada
El hecho de que Santiago Nieto estuviera realizando una investigación por presunta corrupción contra un importante aliado del Presidente Enrique Peña Nieto, y que el viernes haya sido destituido por «transgredir» el código de ética interno de la institución al ventilar que presuntamente recibió presiones del exjefe de asuntos internacionales de la campaña presidencial de Peña Nieto, Emilio Lozoya, para que se le declarara inocente, plantea un escenario muy intrincado justo cuando el tema de la corrupción es un elemento central de cara a las elecciones de 2018.
En Brasil, Odebrecht admitió haber pagado sobornos en varios países de América Latina, incluido México. Para nadie es un secreto que el Partido Revolucionario Institucional (PRI), de Peña Nieto, ha sido la fuerza dominante de la política mexicana durante la mayor parte del último siglo, siendo durante casi todo ese tiempo sinónimo de corrupción.
Lozoya ha afirmado ser inocente de las acusaciones y que no canalizó efectivo a la campaña de Peña Nieto. El presidente también ha negado que sobornos de Odebrecht llegaran a las arcas de su partido.
El procurador interino, Alberto Elías Beltrán, dijo este lunes que la destitución de Nieto fue porque hizo declaraciones públicas sobre hechos y datos de investigaciones a su cargo que están en curso. Añadió que esto va contra el debido proceso y la presunción de inocencia, errores por los que presuntos responsables de delitos podrían quedar libres.
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