Tras conocerse la noticia del fallecimiento del autor de Crónica de una Muerte Anunciada, la congresista electa de la derecha colombiana , María Fernanda Cabal, publicó en su cuenta de Twitter una fotografía donde aparece el Nobel de Literatura junto al hoy ex-mandatario cubano Fidel Castro escribiendo que «pronto estarán juntos en el infierno».
Murales de Siqueiros, Orozco, Rivera, Montenegro y Tamayo, entre otros, decoran las paredes del Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México, recinto donde se honra este lunes a quien dijera que «cada quien es el dueño de su propia muerte». Gabriel García Márquez, en Amor en los Tiempos del Cólera. Pero además de murales, habrá para despedirlo, vallenatos, flores amarillas y música de Béla Bartók.
«La muerte de una vida vivida y las vidas de muertes que vienen», parafraseando a Borges, se congregan en este Palacio, casa máxima de la expresión cultural del país al que el escritor colombiano llegara por primera vez el 2 de julio de 1961, coincidiendo con la fecha en la que se quitara la vida el escritor estadounidense Ernest Hemingway.
«Lo sé porque exactamente en la mañana me llamó (el escritor mexicano) Juan García Ponce y le dije, ‘qué hay de nuevo'». Este me contestó: ‘¿¡Qué hay de nuevo!? ¡Qué el cabrón de Hemingway se partió la madre de un escopetazo!», recordaría García Márquez.
Su muerte el jueves 17 de abril, provocó reacciones que dieron la razón a García Márquez cuando decía: «Escribo para que la gente me quiera». Incontables son las muestras de aprecio y cariño para el colombiano, pero no ha faltado en el escenario la aparición de lo que advirtiera el escritor francés Albert Camus: «La estupidez insiste siempre».
Tras conocerse la noticia del fallecimiento del autor de Crónica de una Muerte Anunciada, la congresista electa de la derecha colombiana , María Fernanda Cabal, publicó en su cuenta de Twitter una fotografía donde aparece el Nobel de Literatura junto al hoy ex-mandatario cubano Fidel Castro escribiendo que «pronto estarán juntos en el infierno».
El tuit provocó el rechazo de los usuarios, lo que llevó incluso a que la publicación fuera borrada de la red social. Sin embargo, mucho «tuiteros» le respondieron con imágenes de Castro junto a Álvaro Uribe, ex Presidente de Colombia y que según el diario El Tiempo, es «el jefe ideológico» de María Fernanda Cabal.
«Contra la estupidez, hasta los dioses luchan en vano», decía con razón el poeta y dramaturgo alemán Johann Wolfgang Goethe. Dejemos entonces a la delirante «congresista uribista» y regresemos a México, donde el autor de «Cien Años de Soledad», fue investigado en su momento por la desaparecida Dirección Federal de Seguridad por sus «vínculos con la izquierda latinoamericana» según documentos en custodia del Archivo General de la Nación, mencionados por el periódico mexicano El Universal.
Juan Rulfo, inspirador de Gabo
“¡Lea esa vaina, carajo! ¡Para que aprenda, y no joda”. Con estas palabras tomó conocimiento García Márquez de Pedro Páramo de Juan Rulfo. El mediador fue Álvaro Mutis: paisano, amigo, guía en lecturas por supuesto, protector y hasta chofer del colombiano (desempeñó esta tarea para su amigo en los días de la recepción del Nobel). Contaba García Márquez que la obra fue decisiva en su carrera, le gustó al grado de aprenderla de memoria y de considerarla como lo que es: la mejor narrativa mexicana de todos los tiempos.
Desde Los Ángeles CA, nos queda muy lejos el Palacio de las Bellas Artes, construido por el arquitecto de origen italiano, Adamo Boari y donde el 23 de mayo de 1950 debutara en su escenario la gran María Callas, cantando la maravillosa opera Norma de Vincenzo Bellini. Pero a nuestro alcance están aún las librerías donde pueden adquirirse las obras de García Márquez , a quien habría que leer para quererlo y para homenajearlo.
Gracias maestro, Gabriel García Márquez.
Foto/ magazinedequeretaro.com
Redacción/Entre Noticias