Deportaciones masivas han causado falta de mano de obra en los EE.UU. para sectores agrícolas, que ahora ven mermada la producción de insumos básicos, derivando en afectaciones para la economía del país.
Washington.- Los inmigrantes hacia Estados Unidos han sido señalados por la comunidad conservadora residente del país como aquellos que «roban» las vacantes de empleo que «podrían ser aprovechadas» por la población local, dando por entendido que son en parte la raíz del problema económico por el que atraviesa esa nación.
El día de hoy es difundido por el diario digital The Hills que, por el contrario, el sector inmigrante del país tiene un gran peso en la economía nacional, impulsando de manera positiva el crecimiento de la misma, dado que es este mismo sector poblacional de aproximadamente 4.7 millones de personas, el que desarrolla pequeñas y medianas empresas dentro del territorio, aportando un total de 776 mil millones de dólares, que será ingresado al sistema económico por medio del recaudo impositivo.
Según informes del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, el sector poblacional inmigrante (legal e indocumentado) ha logrado un crecimiento en el PIB del país en más de 37 mil millones de dólares por año, argumento, que según analistas, echa por tierra las «amenazas contra la economía» que sectores antiinmigrantes sostienen.
Las consecuencias
Señalan que contrario a lo que se defiende en el Congreso desde el núcleo republicano, la amenaza hacia la economía nacional no está en la presencia de inmigrantes, sino en la falta de ellos. Mencionan que sin el trabajo de este sector poblacional, una consecuencia inmediata será el aumento del precio de insumos como la leche y las frutas, entre otros, todo ello por el encarecimiento de la mano de obra en las centrales productoras de los mismos, lo cual se reflejaría en al menos un 61% de aumento en los precios del mercado al menudeo, y de continuar la inercia antiinmigrante, la industria agrícola podría enfrentar pérdidas que oscilan los 60 mil millones de dólares, según afirma la Oficina Agrícola de los Estados Unidos.
Otros estudios señalan que la producción de fruta se vería afectada con un desplome de producción de entre un 30% y un 61%, otros sectores como la hortaliza y la ganadería tendrían sus efectos a consecuencia de la crisis migratoria que se vive ahora en los Estados Unidos, país en el que más del 80% de la fuerza laboral depende de los inmigrantes.
Es en este momento cuando la legislación sobre este tema es demanda por los sectores afectados, mismos que, según analistas, aportan mucho y reciben poco en correspondencia, por parte de las autoridades de los Estados Unidos, a las que urgen una pronta solución, recibiendo en respuesta una postergación en las discusiones sobre el asunto migratorio, lo cual, señalan, no es un buen indicio.
Redacción / Entre Noticias
De que otra manera quieren los republicanosy todo aquel piojo antiimigrante que se les explique que nuestra gente lo unico que quiere es trabajar y salir adelante con su familia y a la ez hacer crecer mas este bendito pais…