El despliegue de tropas estadounidenses y de la OTAN en Afganistán comenzó el 7 de octubre de 2001, al mes siguientes de los atentados contra las Torres Gemelas
La razón de Obama para continuar en Afganistán, según a dicho hoy ante periodistas reunidos en la Casa Blanca, es que no va a permitir que Afganistán sea «un refugio de terroristas», por lo que mantendrá a 5.500 soldados estadounidenses en ese país más allá de 2016.
En marzo de 2012 el ex candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, John McCain, pidió al gobierno de Barack Obama no retirar las tropas norteamericanas de Afganistán. Luego en julio de 2014 John McCain volvió a alzar su voz durante una visita a Kabul al decir que la retirada de las tropas de Afganistán sería «una tragedia».
Hoy Obama termina por darle la razón a quien fuera su rival en la contienda presidencial de 2008: «Como saben, no apoyo la idea de una guerra sin fin», dijo el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, pero insistiendo en que es necesario «hacer este esfuerzo extra para proteger a los Estados Unidos».
Ayer, el secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter, ya había adelantado que su país seguirá manteniendo tropas en Afganistán después del próximo año, al mencionar que era importante para Estados Unidos «formular opciones para 2016 y más allá, así como hacer ajustes a la presencia planeada de Estados Unidos según las circunstancias actuales».
En febrero de 2014, Barack Obama le ordenó al Pentágono planear el retiro de todas las tropas de Afganistán para fin de este año si el gobierno del país asiático no firma un acuerdo bilateral de seguridad, mientras que en diciembre de 2009 Obama hablaba de retirarse de Afganistán antes de acabar su mandato.
Una vez más en 2014 Obama habló de «un fin responsable» de la presencia estadounidense en Afganistán: “A partir de esta primavera, Afganistán asumirá el liderazgo en la defensa y la seguridad de su territorio. Estados Unidos y sus aliados se limitarán a ofrecer entrenamiento y apoyo para acelerar así el proceso de transición”, aseguró Obama durante una conferencia conjunta en la Casa Blanca con el primer ministro de Afganistán, Hamid Karzai.
En 2009 el cineasta estadounidense Robert Greenwald, autor del documental «Rethink Afghanistan» ( Repensar Afganistán) calificó de «desastre» la política estadounidense en Afganistán, en una entrevista concedida al reportero Gabriel Huerta del desaparecido programa de televisión En Contexto. En ella, Greenwald no duda en sostener que la guerra en Afganistan se convirtió en un auténtico infierno para la gente de ese país asiático, visitado por el cineasta para la realización de su extraordinario documental.
Redacción/Entre Noticias