Sessions, senador durante 20 años por Alabama, es considerado el legislador más anti-inmigrante de la cámara alta y tiene un largo historial racista.
«El presidente es un hombre de acción y ya tiene un equipo de gente con grandes cualidades«, dijo Mike Pence, el vicepresidente electo.
Jeff Sessions, de 69 años, senador por Alabama desde hace 20, será el nuevo fiscal general del Estado. En su pasado pesa el hecho de haber sido descartado como juez federal por racista y llegó a decir que lo único que no le gusta del Ku Klux Klan es que consumen drogas, que los grupos que luchan por los derechos civiles son anti-estadounidenses. Consideró además traidores a los abogados blancos que defienden a afro-estadounidenses.
Según reportó el diario The Washington Post, Sessions se ha opuesto a prácticamente todos los proyectos de ley de inmigración que han pasado por el Senado en las últimas dos décadas que hayan contemplado un camino hacia la ciudadanía para inmigrantes indocumentados.
Mike Pompeo, de 63 años, es congresista por Kansas y miembro vitalicio de la Asociación Nacional del Rifle, propuesto por Trump para hacerse cargo de la CIA. Pompeo se graduó en la Academia Militar de West Point, es integrante del Tea Party. Tras dejar el Ejército se licenció en Derecho por la Universidad de Harvard y se ganó la simpatía de Trump por haber sido implacable con Hillary Clinton cuando la investigaron por el ataque al consulado de Estados Unidos en Bengasi.
Michael Flynn, 57 años, general retirado y exoficial de Inteligencia será el nuevo asesor de Seguridad Nacional. De filiación demócrata, fue sin embargo una de las primeras figuras en unirse a la campaña de trump. Se le atribuye un gran poder de influencia sobre él y su actitud amistosa con Vladimir Putin.
Ver nota de David Brooks en La Jornada sobre estos nombramientos
Entre Noticias/Agencias