El presidente Donald Trump ha jurado como el presidente número 45 de los Estados Unidos ante el juez y magistrado jefe del Tribunal Supremo, John Roberts, y con su mano derecha sobre dos biblias, una que le regaló su madre y la otra que usó el presidente Abraham Lincoln (1861-65) en la asunción de la Presidencia.
En su discurso de investidura, Trump afirmó que trabajará por reconstruir esta nación y restablecer la promesa para todo nuestro pueblo: vamos juntos a determinar el curso de este país y del mundo por muchos años.
“Vamos enfrentar desafíos, calamidades, pero vamos a trabajar”, expresó.
Asimismo, el nuevo presidente de Estados Unidos agradeció a Barack y Michelle Obama por su ayuda cordial en esta transición política. “Han sido magníficos, gracias”, les dijo.
Subrayó que “hoy no solo estamos transfiriendo el poder de una administración a otra, o de un partido a otro, sino estamos regresando el poder a ustedes, el pueblo“.
“Estamos emitiendo un nuevo decreto que se escuche en todos los rincones, una nueva visión va a gobernar nuestro país“, mencionó.
De esta manera, hizo una advertencia al mundo: A partir de este día será primero Estados Unidos.
“Cada decisión sobre comercio, impuestos, inmigración, asuntos extranjeros, será para beneficiar a nuestros trabajadores y familias”, dijo
En este tenor, subrayó: “Tenemos que proteger nuestras fronteras de otros países”.
“La protección va a llamar más prosperidad… lucharé por ustedes con todas mis fuerzas y nunca los voy a decepcionar”.
Refirió que Estados Unidos “va a empezar a ganar otra vez, como nunca ha ganado, vamos a traer empleos, vamos a traer nuestras fronteras, vamos a recuperar nuestros sueños”.
“Vamos a hacer grande este país otra vez”, les aseguró a los estadounidenses.
Momentos antes, Mike Pence fue el primero en jurar como vicepresidente de Estados Unidos y cerró con la frase “Que Dios me ayude”.
La ceremonia empezó con la presentación de los invitados ilustres, entre los que se cuentan también los expresidentes George W. Bush y Bill Clinton, junto a sus esposas Laura y Hillary, quien precisamente fue la rival de Trump en las elecciones del 8 de noviembre y salió derrotada por el magnate.
Barack Obama y Donald Trump llegaron al Capitolio a bordo del automóvil “La Bestia” para iniciar la ceremonia de transmisión de mando.
Primero se vio salir de la Casa Blanca a Michelle y Melania, que subieron al mismo vehículo blindado, y después hicieron lo mismo el vicepresidente saliente, Joseph Biden, y su sucesor, Mike Pence.
Melania Trump lleva un vestido de dos piezas de Ralph Lauren en tono azul claro, con guantes y zapatos de tacón a juego, y el pelo recogido, en un estilo que recordaba a la fallecida primera dama Jackie Kennedy.
Michelle Obama, por su parte, escogió un vestido de manga corta en tonos granates y también lleva el pelo recogido.
Aproximadamente por 40 minutos, los Obama se reunieron con Trump y su esposa Melania en la Casa Blanca para conversar y tomar el té.
También se encontraban el vicepresidente electo, Mike Pence, y su esposa Karen.
Obama y Michelle recibieron al matrimonio Trump, que llegó en un vehículo blindado negro, en la escalinata. Melania llegó con un regalo para la aún primera dama y luego posaron para la prensa en las escalinatas de la Casa Blanca antes de ingresar.
Así fue el discurso inaugural del ahora presidente de los EEUU. Donald Trump (inglés):
Entre Noticias/Agencias
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— Rubén Luengas (@rubengluengas) 20 de enero de 2017