El presidente de EU, Donald Trump, exigió al exdirector del FBI James Comey «lealtad» cuando llegó a la Casa Blanca, pero éste tan solo le ofreció «honestidad».
Comey dijo a los legisladores estadounidenses en una audiencia ante el Comité de Inteligencia del Senado que estaba confundido por las «explicaciones cambiantes» proporcionadas por la administración americana sobre su despido el 9 de mayo.
«Cuando fui nombrado director del FBI en 2013 comprendí que lo desempeñaba a satisfacción del presidente», dijo Comey a la Comisión de Inteligencia del Senado.
«El 9 de mayo, cuando me informaron que había sido despedido, inmediatamente me dirigí a casa como un ciudadano privado», declaró. «Pero después las explicaciones, las explicaciones cambiantes, me confundieron y me preocuparon mucho», añadió.
«No sé por qué fui despedido. Tomo al presidente por su palabra de que fui despedido por la forma en la que dirigía la investigación rusa y la presión que esto ejercía sobre él», afirmó Comey en comparecencia en el Comité de Inteligencia del Senado.
En una entrevista con la cadena NBC tras despedir de manera fulminante a Comey el pasado 9 de mayo, Trump aseguró que «la cosa rusa» pesó en su decisión de despedir al director del FBI, al tiempo que añadió que la investigación sobre la posible coordinación de su campaña con Rusia era un «invento».
Comey opinó hoy que posiblemente Trump «estaba frustrado porque la investigación de Rusia estaba tomando demasiado tiempo y energía en la esfera pública».
Comey filtró contenido de sus diálogos con Trump
El exdirector del FBI James Comey explicó hoy que documentó sus encuentros a solas con el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, porque temía que después este «mintiera» sobre el contenido de sus conversaciones.
«Estaba honestamente preocupado por el hecho de que él pudiera mentir sobre la naturaleza de nuestro encuentro», dijo el exdirector del Buró de Investigaciones (FBI) durante su esperada audiencia ante el Comité de Inteligencia del Senado estadounidense.
«Sabía que podría llegar un día en que pudiera necesitar un registro de lo que pasó no solo para defenderme, sino para defender al FBI», agregó ante los senadores, bajo juramento.
El exdirector del Buró dijo, además, que solamente se reunió con el expresidente Barack Obama (2009-2017) en tres ocasiones en sus ocho años de mandato, y que nunca sintió la necesidad de documentar sus encuentros con él, al igual que tampoco lo hizo mientras era un alto funcionario del Departamento de Justicia en la época del mandatario republicano George W. Bush (2001-2009).
Comey afirmó que filtró a la prensa, a través de un amigo, el contenido de sus anotaciones sobre las conversaciones que mantuvo con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, después de que este le amenazara en Twitter con la publicación de «cintas».
En ese mensaje, Trump aseguró: «Más le vale que no haya ‘cintas’ de nuestras conversaciones antes de que él empiece a filtrar a la prensa».
Según explicó Comey este jueves, al ver ese tuit se percató de que podría haber «corroboración» de su versión de las cinco conversaciones, dos de ellas telefónicas, mantenidas con Trump hasta su despido fulminante, por lo que decidió divulgar su versión.
Para reiterar su confianza en su versión de los hechos, Comey espetó: «¡Dios mío! Espero que haya cintas» que documenten sus intercambios con Trump.
Trump: «Estamos bajo asedio»
Mientras Comey declaraba frente al Comité del Senado, el Presidente estadounidense, en un discurso para la conferencia «Camino a la mayoría» de la Faith and Freedom Coalition, dijo a sus partidarios que su movimiento se encontraba «bajo asedio» y prometió seguir luchando.
«Estamos bajo asedio.. pero saldremos de esto más grandes, mejores y más fuertes», declaró en un acto en Washington. «No nos daremos por vencidos ni dejaremos de hacer lo que está bien… sabemos cómo luchar y nunca abandonaremos», aseguró.
El Presidente responderá este jueves al testimonio del exdirector del FBI James Comey por medio de una declaración de su abogado personal Marc Kasowitz, según informó la Casa Blanca.
La audiencia legislativa más anticipada en años
El testimonio de Comey en la audiencia legislativa más anticipada en años pone el foco de atención en la disputa de alto nivel entre dos hombres con imágenes públicas muy diferentes.
El resultado podría tener repercusiones significativas para la presidencia de Trump, que apenas lleva 139 días, en momentos en que el abogado especial Robert Mueller y varias comisiones del Congreso investigan si el equipo de campaña del mandatario se coludió con Rusia antes de las elecciones de 2016.
La Casa Blanca y Rusia niegan cualquier coordinación para favorecer a Trump en la campaña electoral.
En un testimonio escrito publicado el miércoles por la Comisión de Inteligencia del Senado, Comey citó a Trump cuando le dijo que la investigación sobre la intervención de Rusia era una «nube» que le impedía trabajar como presidente.
Comey dijo en su declaración escrita que, en una reunión en el Despacho Oval el 14 de febrero, Trump le pidió que frenara la investigación sobre el exasesor de Seguridad Nacional Michael Flynn, que hace parte de una pesquisa más amplia sobre la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos.
«Espero que vea la forma para dejar pasar esto, de dejar ir a Flynn», dijo Comey, citando a Trump.
El exjefe del FBI también afirmó que Trump le dijo durante una cena el 27 de enero que necesitaba «lealtad».
Trump despidió al entonces jefe del FBI el 9 de mayo y desató una tormenta política y un frenesí mediático, con informaciones que indicaban que el mandatario calificó a Comey como un «fanfarrón».
#ComeyTestimony "La administración de @realDonaldTrump decidió difamarme": James Comey, exdirector del FBI bajo juramento ante el Congreso.
— Rubén Luengas (@rubengluengas) 8 de junio de 2017