El muro anterior a Trump y el de su propia obsesión, son recursos utilizados por demócratas y republicanos en la guerra global contra los débiles. (Rubén G Luengas)
«Creo que México pagará por el muro», dijo el presidente, en el primer fin de semana del 2018. «Tengo una muy buena relación con México. Estamos negociando el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), veremos cómo va eso, sí, pero México pagará, de alguna forma, México pagará por el muro».
Trump hizo del muro fronterizo uno de los temas esenciales de su campaña presidencial en 2016, diciéndole a los votantes que México pagaría el muro que creará una frontera física amurallada entre México y Estados Unidos. El gobierno mexicano ha negado estar dispuesto a financiar tal muro, convertido en una de las más reiterativas obsesiones del actual inquilino de la Casa Blanca.
Trump: "Mexico will pay, in some form, Mexico will pay for the wall." pic.twitter.com/CJAgQBVCjp
— Washington Examiner (@dcexaminer) 6 de enero de 2018
Trump fue todavía más lejos al señalar que que quiere trabajar con los demócratas para encontrar una solución legislativa permanente que permita a aquellos protegidos por el Programa de Acción Inmigratoria Diferida conocido como DACA quedarse en el país, pero solo si incluye el muro fronterizo, además de cambios en el sistema de inmigración.
Trump: We want DACA but need a wall pic.twitter.com/XYgYDwyjZO
— Washington Examiner (@dcexaminer) 6 de enero de 2018
Los demócratas han rechazado estas peticiones, incluyendo los 18.000 millones de dólares que el gobierno ha solicitado para el muro y otros 15.000 millones para gastos adicionales en seguridad fronteriza.
Entre Noticias/Washington Examiner