Durante su visita a Irlanda Francisco ha pedido adoptar medidas severas para que los abusos no se vuelvan a repetir.
Así lo afirmó Francisco en el discurso a las autoridades al comienzo de su visita de dos jornadas a Irlanda, adonde llegó hoy para participar en el Encuentro Mundial de las Familias. “No puedo dejar de reconocer el gravé escándalo causado en Irlanda por los abusos a menores por parte de miembros de la Iglesia encargados de protegerlos y educarlos”, aseveró.
El papa se reunió hoy durante 15 minutos con el presidente de Irlanda, Michael Higgins, en el “Aras An Uachatarain”, el palacio presidencial irlandés, donde planto un árbol en el jardín, como hizo Juan Pablo II en 1979.
El papa llega a una Irlanda donde la herida por los abusos a menores por parte de la Iglesia durante décadas no se ha cerrado aún y después de la publicación en Pensilvania (EU) de un nuevo devastador informe sobre violencia sexual a cerca mil menores por parte de 300 sacerdotes.
“Yo mismo comparto estos sentimientos”, afirmó, y recordó las medidas tomadas por su predecesor, el Papa Benedicto: «su intervención franca y decidida sirve todavía hoy de incentivo a los esfuerzos de las autoridades eclesiales para remediar los errores pasados y adoptar normas severas, para asegurarse de que no vuelvan a suceder».
«Más recientemente, en una Carta al Pueblo de Dios, he reiterado el compromiso, es más, un mayor compromiso, para eliminar este flagelo en la Iglesia; a cualquier precio, moral y de sufrimiento».
“Deseo que la gravedad de los escándalos de los abusos, que han hecho emerger las faltas de muchos, sirva para recalcar la importancia de la protección de los menores y de los adultos vulnerables por parte de toda la sociedad”, enfatizó.
Víctimas de abusos en Irlanda dicen estar decepcionadas con el Papa
El activista irlandés Colm O’Gorman, víctima de abusos sexuales cometidos por el clero en este país, afirmó este sábado que el mensaje lanzado por el papa Francisco a los supervivientes en Dublín es un «vergonzoso intento» de evitar asumir su responsabilidad. O’Gorman, director también de Amnistía Internacional en Irlanda, consideró que el pontífice tenía la «oportunidad perfecta» para abordar este asunto, en la primera jornada del viaje de dos días que efectúa a la isla para participar en el Encuentro Mundial de las Familias. «Una oportunidad para hablar claro, para decir la verdad a la gente de Irlanda. De nuevo, se ha negado a hacerlo. Aún peor, ha desviado la atención extraordinariamente», dijo el activista.
Colm O'Gorman: Pope's comments on clerical abuse a 'shameful deflection of responsibility' #PopeInIreland https://t.co/KONrRafVn2 By @MaritaMoloney pic.twitter.com/CrzlDaiuat
— Irish Examiner (@irishexaminer) 25 de agosto de 2018
Entre Noticias/Agencias