Las autoridades federales insisten en que están reuniendo familias y seguirán haciéndolo, pero la investigación de AP les contradice.
La investigación de AP descubrió muchos casos recientes, pero también algunos que datan de la década de 1980, en los cuales los jueces concedieron solicitudes de adopción a pesar de que los padres reales de los niños nunca fueron informados. AP advierte que aproximadamente 200 niños inmigrantes que permanecen separados de sus padres como resultado de la política de «Tolerancia Cero» de la administración Trump están en mayor riesgo de ser adoptados.
El informe presenta la historia de una niña, Alexa, separada de su madre salvadoreña, Araceli Ramos. Cuando Alexa y Araceli fueron capturados cruzando la frontera de México y Estados Unidos tratando de huir de la abusiva ex pareja de Araceli, Alexa fue arrancada de los brazos de su madre y los agentes le dijeron que «nunca la volvería a ver».
“El caso de Alexa comenzó en noviembre de 2015 bajo la administración de Obama”, escribe AP, “años antes de que se implementara la política de separación familiar de Trump. La separación de 15 meses de su madre, exhibe la frágil situación legal de los niños bajo el cuidado de la Office of Refugee Resettlement y de todo un sistema defectuoso capaz de cambiar dramáticamente el curso de la vida de un niño inmigrante.
Gracias al apoyo del gobierno salvadoreño, organizaciones de derechos migrantes y la opinión pública, más la presión del Departamento de Justicia sobre el gobierno estatal de Michigan, la señora Ramos pudo recuperar a su hija. Los Barr dijeron al juez que el gobierno federal les puso “contra la pared» y no tuvieron otra opción.
Ya tiene más de un año que Alexa vive con su madre de vuelta en El Salvador. Tuvo que volver a acostumbrarse a comunicarse en español, y de vez en cuando, su madre permite que hable por teléfono con los Barr, quienes siempre tuvieron las mejores intenciones. La señora Ramos volvió a surgir en las redes sociales en el verano pasado, aconsejando a otras familias centroamericanas a no ceder ante las medidas del gobierno de Trump.
Tales historias de horror han estado ocurriendo durante años, informa AP, bajo administraciones demócratas y republicanas. En otro caso en Missouri, AP escribe: “Una pareja estadounidense logró adoptar permanentemente a un bebé cuya madre guatemalteca había sido detenida en una redada de inmigración. Los siete años de batalla legal que pusieron fin a los derechos paternos de la madre terminaron en 2014″.
Actualmente dice AP, las redadas masivas contra familias y niños inmigrantes significa que «el riesgo ha crecido exponencialmente» de que haya más adopciones a la vista. Actualmente hay 13,000 niños inmigrantes detenidos en EU, muchos de ellos sin sus padres.
Entre quienes han luchado a favor de adoptar niños para las familias estadounidenses, está Bethany Christian Services, una organización de «extrema derecha» con sede en Grand Rapids, Michigan. Bethany está dirigida por «fanáticos religiosos» y es financiada por donantes multimillonarios como la Secretaria de Educación de Trump, Betsy DeVos. La familia DeVos ha contribuido con más de 3 millones de dólares para financiar esa organización, informa AP.
Bethany Christian Services aseguró que su agencia se dedica a reunificar familias, no separarlas. Desde 1980, solo nueve de 500 niños migrantes que han pasado por sus puertas han sido puestos en adopción. Esta decisión se toma en casos extremos, por ejemplo cuando el menor es víctima de trata o cuando no es seguro que regresen con sus familias.
Durante una audiencia ante el Senado, la la Secretaria de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Kirstjen Nielsen, defendió la detención masiva de niños y dijo que «sus padres eligieron hacer eso».
Entre Noticias/AP