De acuerdo con Law & Crime Sanofi no sería la única conexión de la hidroxicloroquina con Trump, sino también la farmacéutica Novartis.
Mientras la opinión científica sobre la eficacia del medicamento para el tratamiento de la enfermedad COVID-19 resulta estar muy dividida, el presidente Trump tendría un interés financiero personal relacionado con un fabricante de medicamentos francés que produce una versión de marca de dicho fármaco.
Según Law & Crime, citando un informe del periódico estadounidense The New York Times, la familia Trump resultaría beneficiada si se llegara a aplicara el consumo masivo del medicamento. Pero no sólo su familia, sino accionistas y altos ejecutivos que gozan de tener conexiones con el presidente, quien directamente, tiene un interés financiero personal en Sanofi, el farmacéutico francés que fabrica Plaquenil, la versión de marca del hidroxicloroquina.
De acuerdo con los informes de Trump (Executive Branch Personnel Public Financial Disclosure Reports de 2019) presentados ante la Oficina de Ética del Gobierno de los Estados Unidos, los tres fideicomisos familiares del presidente describen inversiones en Dodge & Cox International Stock Fund. El New Times señala que Sanofi, el fabricante de medicamentos, es el mayor holding individual del fondo mutuo. Según MarketWatch, el tamaño exacto de la participación del fondo en Sanofi «en el último cheque fue del 3,3%».
Además de la participación personal de Trump y su familia, al menos dos de sus aliados políticos más cercanos también están estrechamente relacionados con Sanofi. El mega donante y multimillonario republicano Ken Fisher dirige Fisher Asset Management, uno de los mayores accionistas del fabricante de medicamentos.
Según los datos del Comité Federal Electoral (FEC) compilados por OpenSecrets , Fisher Investments ha contribuido con más de dos millones a organizaciones y políticos republicanos en los últimos cinco ciclos electorales.
De hecho un artículo de CNBC de julio de 2019 señala la relación directa de Fisher con Trump:
Kenneth Fisher, fundador de la firma de asesoría de inversiones Fisher Investments, junto con su esposa Sherrilyn, dieron $ 250,000 dólares [para financiar el Comité de Victoria de Trump. Históricamente, Fisher ha respaldado los esfuerzos republicanos y constribuyó a la primera carrera presidencial de Trump.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, un incondicional designado por Trump para ese importante cargo, dirigió anteriormente el fondo de inversión Invesco. Ese fondo también está fuertemente invertido en Sanofi. En una declaración obtenida por el Times, Ross buscó distanciarse de los vínculos de su trabajo anterior, como de los actuales de la administración, relacionados con la hidroxicloroquina.
Ross ha dicho que «no estaba al tanto de que Invesco tiene inversiones en compañías que producen el medicamento contra la malaria», y que no tiene «ninguna participación en la decisión de explorar este fármaco como un tratamiento».
Trump ha estado promoviendo a la hidroxicloroquina como una especie de droga maravillosa, como un intento de sacarle todo el beneficio que se pueda.
«¿Qué tenemos realmente que perder?» preguntó Trump durante una conferencia de prensa el domingo pasado, a pesar de la falta de pruebas sobre sus efectos y las advertencias de los médicos al respecto.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) señala la incertidumbre científica sobre la hidroxicloroquina en una hoja informativa específicamente sobre Plaquenil, que generalmente se prescribe para pacientes adultos con lupus.
Tal como informó Law & Crime el pasado lunes, Sanofi no es la única conexión de hidroxicloroquina con Trump. Novartis, un fabricante de la droga que acordó donar hasta 130 millones de dosis , le pagó al ex abogado personal de Trump, Michael Cohen, más de un millón de dólares a cambio de proporcionar información sobre la política de salud de la administración Trump después de las elecciones en 2016.
Entre Noticias/The New York Times/Law and Crime