Policías y manifestantes en Nueva York.Wong Maye-E / AP
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, rechazó recurrir a la Guardia Nacional para combatir la ola de disturbios originada la semana pasada por la muerte de George Floyd.
«No. No necesitamos ni creemos que sea prudente que la Guardia Nacional esté en la ciudad de Nueva York. Ni ninguna fuerza armada», respondió el alcalde en una transmisión en línea a la pregunta de un periodista sobre si manejaba esa opción.
«Cuando fuerzas armadas externas entran a las comunidades, no sirve de nada. Lo hemos visto durante décadas», aseveró De Blasio, argumentando que los miembros de estas unidades «no están capacitados para las condiciones de la ciudad de Nueva York».
«Son servidores públicos. Nos protegen de una manera diferente. Los aprecio profundamente, pero no están entrenados para las circunstancias aquí», agregó.
Actualmente, la urbe dispone de unos 36.000 oficiales de Policía bien armados y entrenados, aseguró el alcalde. Asimismo, llamó a líderes comunitarios y religiosos a «pasar al primer plano» para ejercer su influencia sobre los manifestantes.
El lunes, el gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, decretó en la ciudad un toque de queda desde las 23:00 hasta las 05:00 (hora local). Durante ese tiempo, el número de policías desplegados en las calles se duplicó hasta llegar a los 8.000. No obstante, la urbe no pudo evitar fuertes saqueos y ataques contra los agentes.
Unas horas antes, el presidente de EU, Donald Trump, criticó a Cuomo por no aceptar el despliegue de la Guardia Nacional ofrecido por la Casa Blanca. «Nueva York ha sido tomada por saqueadores, matones, la izquierda radical y todas las demás formas de escoria y basura», tuiteó el mandatario.
Este martes, Cuomo anunció la extensión del toque de queda desde las 20:00 hasta las 05:00 cada noche hasta el fin de semana.
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