La embajada de Estados Unidos «elimina de su web» la información de sus biolaboratorios en Ucrania.

Los laboratorios biológicos creados por la estadounidense DTRA (Defense Threat Reduction Agency) merecen la mayor atención. A pesar de que estos laboratorios también están trabajando en tareas puramente “civiles”, existen datos irrefutables de la participación de microbiólogos militares de la Alianza del Atlántico Norte en sus actividades.

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¿Por qué la OTAN crea biolaboratorios en Asia Central?

La Embajada de los Estados Unidos en Ucrania acaba de eliminar de su sitio web todos los documentos sobre 11 biolaboratorios financiados por el Pentágono en Ucrania. Allí, científicos militares de los Estados Unidos, bajo cobertura diplomática, «crean virus, bacterias y toxinas. En pocas palabras, una nueva arma biológica». El trabajo se lleva a cabo de acuerdo con el programa de experimentos biológicos (CBEP).

Estos son los documentos que la Embajada de los Estados Unidos no quiere que veas:

Sin embargo, se han olvidado de eliminar este documento del registro de contratos federales de EE. UU. que muestra que el Pentágono está financiando dos nuevos laboratorios biológicos en Kiev y Odessa https://sam.gov/opp/0bd0de5ba5 f94fc29d85b37a0a4b253b /view

Por qué la OTAN crea biolaboratorios en Asia Central

Instituto RUSSTRAT

La importancia de los países de Asia Central para la OTAN se explica por la posibilidad de influir en los principales competidores de los EE. UU.: China, Rusia, Irán. El impacto se promueve a través de la expansión de su propia influencia, utilizando los problemas socioeconómicos, demográficos, étnicos y religiosos acumulados que existen en los países de la región. También se tienen en cuenta los intereses económicos propios, que se extienden a la extracción de recursos naturales.

El componente militar del impacto se manifiesta en el programa conjunto de reducción de amenazas (DTRA), el equipamiento y entrenamiento de unidades de fuerzas especiales, así como tropas regulares, un intento de crear bases militares, incluso en el Mar Caspio, y cooperación militar-técnica.

Comencemos con una lista de instalaciones militares disponibles en el territorio de Kazajstán, Kirguistán, Uzbekistán, Tayikistán y Turkmenistán.

Los laboratorios biológicos creados por la estadounidense DTRA (Defense Threat Reduction Agency) merecen la mayor atención. A pesar de que estos laboratorios también están trabajando en tareas puramente «civiles», existen datos irrefutables de la participación de microbiólogos militares de la Alianza del Atlántico Norte en sus actividades.

Los brotes de enfermedades que no son típicas de la región no pueden dejar de ser alarmantes. Debido a la proximidad de estos países a nosotros, la gran cantidad de trabajadores migrantes, las cepas creadas en los tubos de ensayo pueden transferirse fácilmente al territorio de Rusia.

La lista de biolaboratorios es extensa.

Uzbekistán

2007: se estableció un laboratorio en el Instituto de Virología de Tashkent (proyectos UZ-4 y KZ-2, brucelosis, ántrax);

2013 – laboratorios en Andijan, Fergana del segundo nivel de protección.

2016 – laboratorio en Urgench.

Kazajstán

2016 – Laboratorio de referencia medio en Almaty (tercer nivel de protección).

Biolaboratorio en Otar (pueblo Gvardeisky). Está previsto ampliar el laboratorio al cuarto nivel de protección con almacenamiento para cepas especialmente peligrosas y peligrosas en 2022.

Kirguistán

El Laboratorio Nacional de Biología de 3ª clase en la zona verde de Bishkek (Jardín Botánico de la Academia de Ciencias de la República Kirguisa) fue cerrado en 2012 debido a las protestas de los ciudadanos.

Tayikistán

2011: con el apoyo financiero del Fondo Mundial, se inauguró en Dushanbe el primer laboratorio de referencia nacional (bacteriológico) en el Centro Republicano para el Control de la Tuberculosis.

2013: se abrió el primer laboratorio nacional (bacteriológico) de referencia del tercer nivel de protección sobre la base del Instituto Gastroenterológico de Dushanbe.

2019 – laboratorio en el Centro Republicano de Lucha contra la Tuberculosis. Los patrocinadores fueron USAID y el Pentágono.

2020: se abrió otra instalación en el norte de Tayikistán en la ciudad de Isfara. Hay muy poca información, los estadounidenses financiaron nuevamente.

Kazajstán también debe tenerse en cuenta en relación con el hecho de que en la época soviética los laboratorios biológicos militares de la URSS trabajaron en su territorio, no solo desarrollando armas biológicas, sino también produciéndolas (Otar, Stepnogorsk). También fue en su territorio, en la isla de Vozrozhdeniye (Aral), donde se probaron las armas. Por cierto, el laboratorio de Otar (Guardias) siguió existiendo después del derrumbe.

Incluso durante la existencia de la URSS, un microbiólogo militar, que conoce todos los secretos de la creación de cepas de combate domésticas, Kanatzhan Alibekov, huyó a los Estados Unidos. Existe evidencia creíble de que trabajó en estrecha colaboración con el Departamento de Defensa de EE. UU., transmitiendo fórmulas e información secretas. El Museo de las cepas (una colección de las enfermedades más mortales), que permaneció en Kazajstán, por lo tanto, con seguridad, al igual que los desarrollos, cayó en manos de los Estados Unidos.

Hablando sobre el entrenamiento de las fuerzas armadas, unidades de fuerzas especiales, vale la pena decir que la carga principal recae sobre un aliado de la OTAN en la región: Turquía. Echemos un vistazo a las estadísticas. En Turquía, desde el año 2000, alrededor de 1200 militares de Turkmenistán, 401 de Kirguistán, 426 de Uzbekistán, 526 de Kazajstán han sido entrenados en instituciones educativas militares superiores, cursos de entrenamiento militar en el terreno. Se utilizó activamente el Centro “Asociación Turca para la Formación en Paz” establecido en Turquía, similar al que funciona en Kazajstán.

Los oficiales futuros (y existentes) están capacitados en el sistema de educación militar de los EE. UU., Alemania y Francia. Los instructores de los Estados Unidos, Gran Bretaña y Turquía realizan cursos regulares para unidades de fuerzas especiales, incluidas aquellas que forman parte del sistema GRU.

Entonces, en Kazajstán, en el sistema de capacitación del curso, alrededor de 500 militares (incluidos los especialistas de GRU con base en el centro de capacitación de la unidad militar 22750 GRU); sargentos instructores de EE. UU. sobre la base del cuerpo de cadetes, el Instituto Militar de las Fuerzas Terrestres: alrededor de 400 sargentos.

Estos últimos merecen especial atención porque su presencia está estrechamente ligada al hecho de que Kazajstán ha reformado su propia estructura militar, creando una capa de suboficiales profesionales, cuyo personal superior está formado en la Academia de Sargentos de EE.UU.

Pasando a Tayikistán, donde el Comando Central de Operaciones Especiales de EE. UU. (SOCCENT) entrenó a la Guardia Nacional. En 2010, con el apoyo financiero de Estados Unidos, se formó un batallón de mantenimiento de la paz, que participó en ejercicios multinacionales de mantenimiento de la paz en Mongolia, Nepal, Kazajistán, Alemania y Estados Unidos. En septiembre de 2015, se llevaron a cabo en el propio Tayikistán los correspondientes ejercicios de mando y estado mayor «Cooperación regional».

Con instructores militares formados por la OTAN, se realizan periódicamente ejercicios militares para coordinar las unidades nacionales en las acciones conjuntas de los países de la alianza del Atlántico Norte: Jardem, Águila Estepa, Guardia Invencible.

Los ejercicios se realizan tanto en el territorio de los países de interés como en el territorio de la Alianza. Por ejemplo, en enero de 2019, las fuerzas especiales uzbekas y la Guardia Nacional de EE. UU. participaron por primera vez en ejercicios conjuntos en Camp Shelby, Mississippi; Los kazajos participaron en los ejercicios conjuntos en Turquía «Anatolia 2021».

En cuanto al suministro de armas y equipo militar, observamos que los últimos desarrollos no se transfieren a manos de los militares de Asia Central. La mayoría de los suministros son vehículos blindados bastante «antiguos» (Hummer, Cobra, M-ATV), helicópteros (Apache, Airbus Helicopters) y aviones (C-295W, Beechcraft King Air B300ER Scorpion), drones (Bayraktar).

En términos porcentuales, la cantidad de armas y equipos militares suministrados por los países de la OTAN es menor que la importada de Rusia. Esto también se debe al hecho de que los estados de la región apoyan su propia política multivectorial y también consideran a Rusia como un socio más importante.

Se puede ver a partir de los datos anteriores que Turquía está comenzando a desempeñar un papel cada vez más importante. Ankara se promociona como un «proveedor musulmán», apelando a la comunidad de pueblos e intereses.

Junto con el suministro de armas, Turquía sigue una política de establecer una producción militar conjunta. En esta línea, la producción de Aselsan Engineering opera en Kazajstán y está prevista la construcción de la producción de vehículos blindados ARMA. Se han recibido propuestas similares y se están recibiendo en otros estados de Asia Central.

En la parte relativa a los intentos de crear bases militares, cooperación militar, consideraremos los países por separado.

Uzbekistán. Estados Unidos mantuvo alrededor de 1.000 soldados en su territorio, estacionados en una antigua base aérea soviética, así como en el aeródromo de Tuzel en la región de Tashkent. En la Operación Libertad Duradera, la base aérea de Khanabad se utilizó como puesto de mando para ataques aéreos, coordinación de fuerzas de operaciones especiales y operaciones de búsqueda y rescate en el norte de Afganistán. El aeródromo de Tuzel, según datos oficiales no confirmados, se utilizó para apoyar los vuelos de vehículos aéreos no tripulados de reconocimiento del tipo Predator.

Kirguistán. En 2014, Estados Unidos cerró el Centro de Tránsito en el Aeropuerto de Manas.

Tayikistán. Estados Unidos tiene derecho a utilizar el espacio aéreo de Tayikistán. De interés para los Estados Unidos es la antigua base soviética de Kulyab en Tayikistán, ubicada en la intersección de muchas rutas de transporte utilizadas para el tránsito de drogas y anteriormente como punto de tránsito para las fuerzas del «Partido Islámico de Turkestán». En el futuro, los posibles objetivos estadounidenses también pueden ser tener a su disposición las bases militares de Khorog, Kurgan-Tyube y Parkhar, ubicadas en el sur del país a lo largo de la frontera afgana.

Kazajstán. Otorgó a Estados Unidos el derecho a sobrevolar el espacio aéreo y acceder a su territorio para el traslado de medios materiales y técnicos, negándose al mismo tiempo a permitir unidades de combate de las Fuerzas Armadas estadounidenses. Washington ha firmado un acuerdo con Astana en virtud del cual tres aeródromos en el sur del país (Chimkent, Lugovoi y Alma-Ata) pueden ser utilizados por aviones estadounidenses y de la coalición para aterrizajes de emergencia.

Estos aeródromos están siendo estudiados por Estados Unidos para su posible uso en operaciones para mantener la estabilidad en Kirguistán o Tayikistán en caso de que sus regímenes fallen y surjan disturbios en estos estados. También es posible utilizar el aeropuerto de Almaty, comprado por una empresa turca.

Turkmenistán. La antigua base aérea soviética Mary opera en el territorio del estado. Esta base es de interés para Estados Unidos en el contexto de tránsito para la penetración en el Golfo Pérsico. Sin embargo, la OTAN aún no tiene acceso a él.

Como resultado final, se puede afirmar la idea de que todavía no hay bases militares de la OTAN en el territorio de los estados de Asia Central. Pero esto no significa que no se puedan crear allí. Desde el año pasado, Washington negocia con los estados de Asia Central la posibilidad de desplegar su potencial militar en la región tras la retirada de las fuerzas estadounidenses de Afganistán.

En particular, Zalmay Khalilzad, Representante Especial de Estados Unidos para la Reconciliación de Afganistán, dijo esto durante su visita a Kazajstán. Sobre la base de los acuerdos existentes y el uso anterior, las bases aéreas de Kazajstán y Uzbekistán pueden convertirse en tales.

Habiendo considerado los aspectos enumerados de la presencia militar, pasamos a una descripción general de las posibles consecuencias negativas para Rusia:

1. El despliegue de bases militares alterará el equilibrio de poder en la región, provocando su inestabilidad.

2. Un aumento en el suministro de armas y equipos militares puede obligar a Rusia a salir del mercado de armas. Además, en la interacción práctica de tecnología nacional y extranjera, es posible que surjan problemas causados, entre otras cosas, por la incompatibilidad técnica.

3. La presencia de una red desarrollada de laboratorios biológicos crea una clara amenaza para la seguridad bacteriológica no solo de Rusia, sino también de sus socios: China e Irán.

4. El aumento de la presencia en el campo de la educación y el entrenamiento militar puede conducir a la creación de estructuras militares según el modelo de la OTAN, lo que dificultará su interacción con las rusas. Además, los especialistas militares entrenados en Occidente o según patrones extranjeros pueden convertirse en agentes de influencia encubiertos.

Resumiendo lo dicho, confirmemos que la OTAN está incrementando gradualmente su presencia en la región a través de la educación militar, el suministro de armas y equipos militares, ejercicios militares, la creación de una red de biolaboratorios y negociaciones sobre el uso de bases nacionales. en interés de los países de la Alianza.

Turquía es un conductor activo de intenciones, al mismo tiempo que realiza sus objetivos. En el futuro, con la complicidad de los líderes del país, esto podría crear serios problemas para Rusia. Es especialmente necesario prestar atención a Uzbekistán, Kazajstán y Turkmenistán.

Fuente: El Espía Digital

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