Javier Barrera relata para «Entre Noticias» la desaparición de su hermano y el engaño del que fueron víctimas él y su familia, por parte del Estado colombiano.
En el contexto de las desapariciones forzadas ocurridas el pasado 26 de septiembre en Ayotzinapa, México, luego de que el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, diera a conocer la versión «oficial» sobre los hechos, en los que, supuestamente, las víctimas fueran incineradas hasta no permitirse físicamente ningún examen de ADN, resulta de gran importancia el testimonio de Javier Barrera.
Javier Barrera Santa, coordinador ASFADDES Seccional Antioquia y Defensor de Derechos Humanos, relata para «Entre Noticias» las anomalías de las que fueron testigos él y su familia tras la desaparición de su hermano el 16 de mayo de 1998 en Colombia.
Relata que el gobierno de ese país les dio a conocer que su hermano habría sido incinerado y posteriormente sus restos arrojados a un río, por lo cual se hacía «imposible» su localización. Lo anterior fue la versión oficial sobre los hechos, hasta que 11 años después, debido a la declaración de uno de los paramilitares, fue encontrado el cuerpo de la víctima en una fosa común, cayendo en cuenta del engaño del que habían sido víctimas por parte del Estado.
A continuación el testimonio:
Redacción/Entre Noticias
Lo sabemos