«Los bombardeos no matan una ideología. La alimentan»
Unas 4000 personas han tomado este sábado las calles de Londres, capital británica, en protesta por un proyecto de ley que, de ser aprobado, legalizará la participación de su país en los bombardeos contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en Siria.
Los manifestantes, convocados por la Coalición de Parar la Guerra (Stop the War Coalition), han iniciado la marcha desde la calle Downing Street, donde se encuentra la residencia del primer ministro del Reino Unido, David Cameron.
«Este es un conflicto que no puede y no será resuelto con bombardeos», ha arengado a la multitud el director de la Coalición de Parar la Guerra, Andrew Murray.
Los manifestantes portaban pancartas con consignas antibélicas: No bombardeen Siria» y «Los bombardeos no matan una ideología, sino la alimentan».
«Este es un conflicto que no puede y no será resuelto con bombardeos», ha arengado a la multitud el director de la referida coalición antiguerra, Andrew Murray.
En declaraciones recogidas por la agencia francesa de noticias AFP, Murray además ha pedido a los ciudadanos que respalden a Jeremy Corbyn, líder del opositor Partido Laborista (PL) y exdirigente de la Coalición de Parar la Guerra en su lucha contra posibles bombardeos en Siria.
Un manifestante de 65 años de edad ha acusado a las autoridades británicas de carecer de cualquier planificación para la intervención militar en Siria, pendiente de la aprobación en el Parlamento la próxima semana.
Refiriéndose a la intervención de su país en Irak y Afganistán, el manifestante ha denunciado: “Hemos tenido bastante aventuras en esos países (…) Los hemos desestabilizado”.
Los participantes en esa jornada de protesta coinciden en que se trata de una trayectoria ya recorrida. “Hemos probado esa política anteriormente”, dicen.
En una carta enviada el pasado jueves a los correligionarios en el Parlamento, Corbyn les explicó las razones por las que no debían apoyar el plan para la participación de su país en los bombardeos contra Daesh en Siria.
Ante la división entre los miembros de su partido sobre una eventual votación en el Parlamento, el político británico dijo que se reunirá el lunes con los miembros de su equipo para llegar a un consenso.
Líder del opositor Partido Laborista (PL), Jeremy Corbyn
El pasado jueves, el primer ministro británico defendió en la Cámara de los Comunes la necesidad de extender a Siria los ataques que el Reino Unido lleva a cabo en Irak desde septiembre de 2014, en el marco de los ataques de la llamada coalición anti-EIIL liderada por EE.UU. Pero necesita el permiso de los diputados y en 2013 se lo denegaron.
Londres, no obstante, ya está involucrado en los bombardeos contra Siria. El pasado 17 de julio, el Ministerio de Defensa del Reino Unido se vio obligado a publicar documentos que revelaban que sus cazas habían bombardeado Siria aunque carecían del permiso del Parlamento.
El país europeo busca aumentar su papel en el conflicto de Siria, mientras que tanto el Gobierno de Irak como el de Siria cuestionan la efectividad de dichos bombardeos y critican a la coalición liderada por EE.UU. por los daños colaterales y a su estructura.
