Lo ocurrido en Milwaukee tiene un telón de fondo, un contexto, del que poco se habla en los medios de información.
El gobernador de Wisconsin, Scott Walker, había autorizado el domingo el despliegue de la Guardia Nacional en Milwaukee para prevenir que se repitieran las protestas de la noche del sábado, que derivaron en enfrentamientos de los manifestantes con la policía y el incendio de varios negocios y de una gasolinera.
Los disturbios tuvieron como desencadenante la muerte en la tarde del sábado de un joven de 23 años que trató de huir a pie cuando los agentes detuvieron el automóvil en el que viajaba.
El fallecido era el joven negro Sylville Smith, quien portaba una pistola semiautomática, y el policía que le disparó, también negro, no ha sido identificado y estará de baja mientras dure la investigación estatal sobre lo ocurrido.
Para poner esta noticia en contexto, existen datos del Center on Wisconsin Strategy y de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee, que resultan útiles y reveladores.
Milwaukee en los índices de racismo
Tasa de desempleo entre la comunidad afrodescendiente
Tasa de desempleo negro
Según el último censo, el estado de Wisconsin tiene una tasa de desempleo negro de 19,9 %, la más del país para la comunidad afroamericana y que quintuplica la tasa de desempleo blanca (es decir, por cada desempleado blanco hay 5 afroamericanos). Los índices de pobreza castigan con extrema dureza a la población negra: 40 %, mientras entre la población blanca apenas llega al 8%.
Según el texto de la periodista Celeste Murillo, sobre el telón de fondo existente ante los disturbios, está la pobreza y la marginación de la población negra que alimenta el estigma y la guetización de los barrios en un círculo vicioso de racismo: mientras el 1,6 % de los blancos viven en barrios pobres, ese porcentaje trepa al 33 % entre los afroamericanos. El norte de Milwaukee es negro y pobre, el centro y sur está poblado de suburbios blancos y ricos. Nadie se mezcla. Los hogares blancos del área metropolitana tienen un ingreso medio de 62 mil dólares, un hogar negro solo alcanza los 26 mil. Niños y niñas negras son condenados a la pobreza y las peores escuelas: los estudiantes blancos pobres representan el 24,2 % mientras que los negros superan el 78 %.
La segregación y el racismo encuentra su punto culminante en las cárceles superpobladas de afroamericanos, la tasa de encarcelamiento de varones negros es de 11,9 % mientras la de varones blancos no llega al 1 %. Según un estudio de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee en 2013, el 56 % de los afroamericanos del condado de Milwaukee entre 30 y 34 años de edad y el 40 % de los jóvenes entre 25 y 29 años, ya habían estado en la cárcel al menos una vez.
Entre Noticias/Agencias/La Izquierda Diario