«El que busca la verdad, corre el riesgo de encontrarla«. (Manuel Vicent)
Según los medios locales, dicho proyecto de ley ha sido aprobado en lectura preliminar por la Knesset (parlamento israelí) con 60 votos a favor y 49 en contra.
Tal como indica el diario israelí The Times of Israel, para convertirse en ley, el proyecto –propuesto por los parlamentarios Yoav Kish (del partido Likud), Shuli-Muaelem Refaeli y Bezalel Smotrich (del partido Hogar Judío)– deberá pasar tres lecturas más.
El proyecto fue aprobado a mediados de noviembre para evitar la evacuación de la colonia de Amona y reconocer otras colonias ilegales. De aprobarse en las tres lecturas restantes, se regularizarán más de 120 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación de los territorios palestinos de Cisjordania y Al-Quds en la Guerra de los 6 Días, en 1967.
Por su parte, la ministra israelí de asuntos judiciales, Ayelet Shaked, ha agradecido a “los que permitieron el avance” de tal proyecto, lo que dará pie a la extensión de las colonias israelíes consideradas “ilegales” por diferentes países y organismos internacionales.
Horas antes, el ministro de educación del régimen de Tel Aviv y líder de Hogar Judío, Naftali Bennett, afirmó que la llamada Ley de Regularización de colonias “es una gran victoria para la derecha israelí”.
“La Ley de Regularización es la punta de lanza para extender la soberanía” israelí y anexionarse toda Cisjordania”, sostuvo Bennet.
Conforme los datos de la oficina central de estadísticas de Israel, en los primeros seis meses de 2016 se inició la construcción de 1195 viviendas en colonias ilegales, un 40 por ciento más que en los seis meses previos.
La otra versión histórica en voz del judío Miko Peled
Video de Miko Peled, autor judío del libro The General Son (El hijo del general), ofreciendo un análisis contrario al que predomina en los medios sobre histórico problema. (En inglés).
Paled es nieto del ruso Abraham (Nissan) Katsnelson, uno de los 37 sionistas que sentenció al pueblo palestino a la Nakba (Cátastrofe) por ser firmante de la creación de Israel en 1948, e hijo del general Matitiahu -Matti- Peled, que invadió a Palestina en 1948 como joven oficial de la organización Palmaj y la ocupó en 1967 como general. Arrepentido en 1969 de general se convirtió en ‘activista por la paz’ condenando la ocupación israelí de la Ribera Occidental, Gaza y el Golán sirio. Miko, siguió los pasos de su padre y de adolecente se unió a las fuerzas especiales israelíes, pero pronto se lamentó y desde 1983 luego de la masacre de Sabra y Shatila comenzó su activismo por la paz e hizo de su pluma intelectual un rechazo permanente a la ocupación desde el mismo interior israelí.
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