La orden inicial prohibía la entrada a EEUU de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana durante 90 días, detenía temporalmente la entrada de refugiados e interrumpía indefinidamente la entrada de refugiados de Siria.
El texto creó tanta confusión entre las aerolíneas y los aeropuertos que la Asociación del Transporte Aéreo Internacional (IATA) criticó su entrada en vigor «sin coordinación ni previo aviso».
El 3 de febrero pasado un juez de Seattle bloqueó la aplicación del decreto migratorio y seis días más tarde un tribunal de apelaciones de San Francisco mantuvo esta suspensión.
La reacción de Trump no se hizo esperar en su tan socorrida cuenta de Twitter tras el anuncio de la decisión del tribunal
«NOS VEMOS EN LA CORTE, LA SEGURIDAD DE NUESTRA NACIÓN ESTÁ EN JUEGO»
SEE YOU IN COURT, THE SECURITY OF OUR NATION IS AT STAKE!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 9 de febrero de 2017
Según afirmara este sábado el secretario de Seguridad Interior, John Kelly, el nuevo decreto sobre inmigración que prepara la Casa Blanca permitirá una mejor aplicación que el texto anterior, suspendido por la justicia estadounidense:
«El presidente tiene intención de publicar una versión (del decreto) más concisa y simplificada«, dijo durante la Conferencia sobre Seguridad de Múnich.
«Esta vez tendremos la oportunidad de trabajar para desarrollar el plan, sobre todo para evitar que alguien se encuentre bloqueado por el sistema»
Kelly volvió a asegurar que el primer decreto migratorio del presidente Donald Trump no iba dirigido contra los musulmanes, sino que se trataba de una «pausa» para revisar los procedimientos migratorios respecto a «algunos países, siete en particular», con el fin de garantizar que ningún «terrorista» entre en el país.
Tensión migratoria y crímenes de odio
Mientras tanto la tensión migratoria que se vive en Estados Unidos sigue sumando capítulos alarmantes después que un inmigrante de 39 años recibiera un impacto de bala al sur de Seattle.
Según detalló ‘The Seattle Times‘ el herido pertenece a la comunidad conocida como Sikh y fue atacado por un hombre de raza blanca armado. «Vuelve a tu propio país» le gritó antes de disparar.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado viernes y fueron catalogados como un «crimen de odio». El agresor que fue identificado como Adam Purinton, se acercó a su víctima que se encontraba en su automóvil camino a Kent (Washington).
Con una máscara en la cara, se acercó al vehículo y apretó el gatillo tras pedirle a gritos que abandonara el territorio norteamericano. La vida del herido no corre peligro y la policía puso en marcha un operativo para detener al agresor.
Kent police chief says dept. is investigating last night's shooting as a possible hate crime against member of Sikh community. pic.twitter.com/pLcWsobvm4
— Ryan Takeo (@RyanTakeoK5) 4 de marzo de 2017
El padre del Sikh, un movimiento religioso indio, señaló que el suceso se debe al mensaje antiinmigrante del presidente de EEUU, Donald Trump. En este sentido realizó un llamado significativo. «No envíen a sus hijos a los Estados Unidos», alertó el progenitor del hombre herido.
Entre Noticias/Agencias