«El racismo es la más evidente expresión de los miedos de los hombres. Saber que ni somos los únicos, ni somos los mejores».
Desde el fin de semana pasado, Trump lanzó en su cuenta de Twitter comentarios peyorativos contra las representantes demócratas de las minorías étnicas: Alexandria Ocasio-Cortez, Rashida Tlaib, Ayanna Pressley e Ilhan Omar, conocidas en el Capitolio como ‘el escuadrón’, a quienes ha invitado a «volver» a sus países, que caracteriza como «lugares infestados por la criminalidad».
En nuevo mitin electoral, celebrado el miércoles en la ciudad de Greenville, en el estado de Carolina del Norte, el mandatario republicano volvió a acusar a las cuatro congresistas, de las cuales Omar y Tlaib son musulmanas, y han sido acusadas de «no amar» a Estados Unidos.
«Estas congresistas están ayudando al ascenso de una izquierda militante y dura (…) No aman a nuestro país, y en algunos casos creo que hasta lo odian», indicó Trump en el acto que duró unos 90 minutos.
«No tengo tiempo de mencionar tres nombres, llamémosla Cortez», dijo en una expresión particularmente irónica hacia la congresista de Nueva York, de madre puertorriqueña, mientras la estridente audiencia abucheaba a las legisladoras.
Luego, cuando mencionó a Ilhan Omar, estadounidense nacida en Somalia y una de las primeras mujeres musulmanas en llegar al Congreso, los fanáticos rompieron el auditorio en un solo clamor: «¡Envíala de vuelta! ¡Envíala de vuelta!».
La aludida congresista de origen africano respondió, más tarde, a las críticas de Trump con un poema de Maya Angelou que compartió en su cuenta de Twitter:
«Puedes dispararme con tus palabras, puedes cortarme con tus ojos, puedes matarme con tu odio, pero aun así, como el aire, me levantaré».
You may shoot me with your words,
You may cut me with your eyes,
You may kill me with your hatefulness,
But still, like air, I’ll rise.-Maya Angelou https://t.co/46jcXSXF0B
— Ilhan Omar (@IlhanMN) July 18, 2019
Por su lado la congresista Ocasio-Cortez denunció los comentarios racistas de Trump, diciendo: «señor presidente, el país del que vengo, y el país al que todos juramos, es Estados Unidos (…) Está usted enojado porque no puede concebir un EU que nos incluya».
Tlaib, a su vez, acusó al presidente de ser él «la crisis». «Él es la crisis. Su peligrosa ideología es la crisis. Es necesario un juicio político», reclamó la legisladora.
Justo el martes pasado, la Cámara de Representantes, dominada por los demócratas, aprobó una resolución de condena a los comentarios racistas del presidente contra estas cuatro congresistas a quienes el presidente identifica como «las malvadas jóvenes legisladoras socialistas». Solo cuatro republicanos en la Cámara Baja votaron a favor del texto.
Pese a las críticas, Trump no se ha modificado su posición. Al contrario, se ha aferrado a ella. Poco antes de salir al mitin en Carolina del Norte declaró a reporteros en la Casa Blanca: «Si la gente quiere irse de nuestro país, puede hacerlo. Si no quieren amar a nuestro país, si no quieren pelear por nuestro país, pueden hacerlo».
No pasa desapercibido par muchos en EU que las actitudes de Trump, coinciden con las del Ku Klux Klan en el sentido de desear un «Estados Unidos, estadounidense, para los estadounidenses».
Entre Noticias/Agencias
