Irán, como Turquía, es el hogar de una gran población de etnia kurda y Rouhani expresó su comprensión por las preocupaciones turcas sobre la seguridad en sus fronteras, y agregó: «Creemos que se debe adoptar un camino correcto para eliminar esas preocupaciones».
El presidente de Irán, Hassan Rouhani, pidió a Turquía este miércoles que muestre moderación y evite la acción militar en el norte de Siria, debido a que las fuerzas en Ankara estaban preparadas para avanzar hacia un área que los militares estadounidenses dejaron vacante.
Mientras Rouhani hablaba, las Fuerzas Terrestres del Ejército de Irán comenzaron un simulacro militar no anunciado en el noroeste del país que limita con Turquía, informó la Agencia de Noticias de Estudiantes Iraníes ISNA.
Las fuerzas turcas y sus aliados rebeldes sirios entrarán en Siria «en breve», dijo un funcionario turco el miércoles, en una operación que las potencias mundiales temen que pueda abrir un nuevo capítulo en la ruinosa guerra de ocho años de Siria.
Irán, un aliado cercano del presidente sirio Bashar al-Assad, ha instado regularmente a Turquía a respetar la integridad territorial de Siria y dice que todas las fuerzas militares extranjeras «con presencia ilegal», incluido Estados Unidos, deben abandonar el país.
Irán, como Turquía, es el hogar de una gran población de etnia kurda y Rouhani expresó su comprensión por las preocupaciones turcas sobre la seguridad en sus fronteras, y agregó: «Creemos que se debe adoptar un camino correcto para eliminar esas preocupaciones».
Al informar sobre el propio ejercicio militar de Irán que comenzó el miércoles, ISNA dijo que incluía unidades de reacción rápida, brigadas móviles y de ataque, y helicópteros de la Unidad Aérea de la Fuerza Terrestre del Ejército.
Ankara ha dicho que tiene la intención de crear una «zona segura» en el noreste de Siria con el fin de devolver a millones de refugiados allí, pero el esquema ha alarmado a algunos aliados occidentales tanto como los riesgos planteados por la operación militar.
Para Ankara, que considera a los combatientes kurdos de YPG en el noreste de Siria como terroristas debido a sus vínculos con militantes que libran una insurgencia dentro de Turquía, una afluencia de sirios no kurdos lo ayudaría a asegurar un amortiguador contra su principal amenaza de seguridad.
Los kurdos se extienden en Siria, Irak, Irán y Turquía.
Irán, dominado por musulmanes chiítas, tiene hasta 10 millones de ciudadanos kurdos, en su mayoría musulmanes sunitas. Se enfrenta a demandas de mayor autonomía kurda del Partido Democrático del Kurdistán iraní (PDKI), un grupo armado de oposición.
También ha habido frecuentes enfrentamientos en el área entre las fuerzas de seguridad iraníes y los grupos militantes kurdos iraníes con sede en el vecino Iraq, como el Partido de la Vida Libre de Kurdistán (PJAK), acusado por Teherán de tener vínculos con los insurgentes kurdos del PKK en Turquía.
Entre Noticias | Reuters