“Un tratamiento de exosomas (vesículas extracelulares que producen la mayoría de las células) mínimamente invasivo y no quirúrgico puede influir en la reparación y el daño que sigue a un derrame cerebral severo”, explicaron los científicos.
Mediante el estudio realizado en cerdos se logró observar que las células cerebrales no tratadas cerca del sitio de la lesión rápidamente murieron por falta de oxígeno, lo cual desencadenó una acción letal de señales en toda la red cerebral y comprometió a millones de células sanas.
En tanto que, explicaron mediante un comunicado de la universidad, en las áreas del cerebro tratadas con exosomas que se tomaron de un almacenamiento frío y se administraron por vía intravenosa, las células lograron interrumpir el proceso de muerte cerebral.
“Básicamente, durante un accidente cerebrovascular, estos radicales libres están por todas partes destruyendo cosas. Lo que hace la tecnología del exosoma es comunicarse con las células en peligro y funcionar como un agente antiinflamatorio para interrumpir y detener más daños”, comentó uno de los investigadores, Steven Stice.
Seguido de dichos resultados, los investigadores analizaron neuroimagenes tomadas 24 horas después del accidente cerebrovascular en los cerdos y luego aplicaron puntajes de recuperación comúnmente utilizadas en humanos, tales como función de la marcha, velocidad de caminata y la longitud de la zancada.
“Al registrar la relación entre las mediciones cerebrales y los resultados funcionales, las nuevas escalas de evaluación pueden ayudar mejor a los médicos a predecir qué tan rápido se recuperará una persona en tiempo real”, comentó.
En cuanto al futuro del tratamiento con exosomas, el equipo anticipó que la tecnología patentada de exosomas neurales, llamada AB126, se presentará para ensayos clínicos en 2021.
Redacción Entre Noticias | Notimex | evr