Ardern impuso duras medidas de bloqueo a los neozelandeses durante la pandemia. Después de levantar brevemente las restricciones, la «emperatriz Kiwi» volvió a imponer los bloqueos
Ardern tomó poderes de «emergencia» durante la pandemia de Covid para decretar algunos de los bloqueos más duros del mundo. Ahora está lista para pasar su cetro a un nuevo primer ministro “liberal”.
En un discurso entre lágrimas el miércoles, Ardern dijo que personalmente no se sentía con ganas de otro mandato. Por lo tanto, ahora planea dejar el cargo el 7 de febrero.
“Creo que liderar un país es el trabajo más privilegiado que alguien podría tener, pero también uno de los más desafiantes”, dijo Ardern. “No puedo y no debo hacerlo a menos que tenga el tanque lleno y un poco de reserva para esos desafíos inesperados”.
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“Estos han sido los cinco años y medio más gratificantes de mi vida. Me voy porque un trabajo tan privilegiado conlleva una gran responsabilidad”, agregó.
Ardern impuso duras medidas de bloqueo a los neozelandeses durante la pandemia. Después de levantar brevemente las restricciones, la «emperatriz» Kiwi volvió a imponer los bloqueos después de que se informara un solo caso nuevo de Covid .
También retrasó las elecciones parlamentarias del país cuatro semanas en agosto de 2020 debido a la pandemia y dijo: “en última instancia, quiero asegurarme de que tengamos unas elecciones bien organizadas que brinden a todos los votantes la mejor oportunidad de recibir toda la información que necesitan”.
Por lo tanto, Jacinda Ardern entró en conflicto con los tribunales superiores de la nación, que dictaminaron que muchos de sus decretos de Covid eran inconstitucionales.
En febrero, el Tribunal Superior de Nueva Zelanda bloqueó las vacunas obligatorias contra el covid-19 del país para la policía y el ejército por considerar que violaba su libertad de religión. En abril, el Tribunal Superior determinó que el gobierno de Nueva Zelanda violó los derechos de libertad de movimiento de los ciudadanos al impedir que algunos titulares de visas regresaran a sus hogares. En agosto de 2020, el Tribunal Superior determinó que el gobierno de Nueva Zelanda se excedió en sus poderes al pedir a los residentes que se quedaran en casa durante los primeros nueve días del confinamiento por el coronavirus.
El New York Times, sin embargo, se entusiasmó con Ardern como un «ícono liberal global» en un gemido de una pieza de despedida.
“Jacinda Ardern, quien se convirtió en un ícono liberal mundial como primera ministra de Nueva Zelanda, pero enfrentó desafíos políticos cada vez más profundos con una elección que se avecinaba en casa, dijo en un anuncio sorpresa el jueves que dejaría el cargo de líder del país”, afirmó el Times.
The Times no pudo evitar blanquear los bloqueos restrictivos de Ardern, mientras que convenientemente no notó que no pudieron evitar el inevitable aumento de casos en marzo de 2022.
Ardern, de 42 años, se convirtió en la Primer Ministro en 2017 y obtuvo una histórica victoria en la reelección en 2020, en gran parte gracias a la fuerza de la respuesta de Nueva Zelanda al covid, que permitió a los residentes llevar una vida mayormente normal durante gran parte de la pandemia”, bromea el Times.
Ardern tenía otras imperfecciones en su indecoroso reinado. En diciembre, Ardern fue captado por un micrófono abierto llamando al líder de la oposición David Seymour un «p—- arrogante». Seymour se había dignado ofender a Su Majestad Real al desafiarla a “dar un ejemplo de cometer un error, disculparse adecuadamente y arreglarlo”.
El reinado de la Reina Covid se acerca así a su fin. Por el bien de Nueva Zelanda y el resto del otrora mundo libre, esperemos que aprendamos una lección de estos “íconos liberales globales” y su historial irrefutable de fracasos.
Fuente: Becker News
