En una comparecencia urgente en la Casa Blanca, Obama aseguró que las autoridades estadounidenses están preparadas para asistir al Gobierno francés.
Sin embargo, el mandatario dijo no haberse puesto en contacto aún con el presidente de Francia, François Holland, debido a que la situación todavía no ha sido controlada.
El presidente, que calificó de “atroces” los ataques, no quiso hacer ninguna valoración pública sobre la autoría de los mismos hasta no tener más detalles.
Obama reiteró que Francia puede contar con el apoyo de Estados Unidos para lo que sea necesario, y subrayó que el pueblo estadounidense estará “al lado” del pueblo francés “en esta difícil situación”.
“París en sí representa los valores eternos del progreso humano. Los que piensan que pueden aterrorizar al pueblo de Francia o los valores que representan están equivocados”, aseveró el presidente.
“En este momento trágico, recordamos que los lazos de libertad, igualdad y fraternidad no son sólo valores por los que el pueblo francés se preocupa profundamente, sino que son valores que compartimos”, agregó.
Obama insistió en que esos valores perdurarán “más allá” de cualquier acto de terrorismo u odio como los perpetrados en el día de hoy.
El mandatario transmitió sus condolencias a las víctimas, e insistió en que los culpables se enfrentarán a la Justicia.
“Vamos a hacer todo lo necesario para trabajar con el pueblo francés y con las naciones de todo el mundo para llevar a estos terroristas ante la justicia y para perseguir a las redes terroristas que van contra nuestro pueblo”, agregó.