El ministro del Interior ucraniano, Arsén Avákov.informó que un oficial del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) murió este domingo y otros cinco efectivos resultaron heridos en la operación «antiterrorista» impulsada por Kiev contra los activistas prorrusos que se lleva a cabo en la ciudad de Slaviansk.
Rusia dice que «depende de Occidente que se evite una guerra civil en Ucrania», mientras el derrocado presidente de Ucrania, Viktor Yanukóvich, alega que la CIA «está detrás» de la decisión del nuevo gobierno ucraniano de desplegar fuerzas armadas para aplastar la «cada vez más audaz» insurgencia pro -rusa.
Estados Unidos «tiene su parte de responsabilidad en el desencadenamiento de una guerra civil en Ucrania e interfiere groseramente en lo sucedido, indicando lo que hay que hacer», denunció Yanukóvich. En particular, el presidente depuesto acusó al director de la CIA, John Brennan, de «autorizar el uso de la armas» y «provocar el derramamiento de sangre en Ucrania».
Kiev y Occidente por su lado, acusan al Kremlin de promover la desestabilización en el Este de Ucrania. El presidente interino, Alexander Turchinov anunció por televisión que el Ejército será utilizado en una «operación contraterrorista» por decisión del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa (CSND) y exigió a los rebeldes que se rindieran antes de las ocho de la mañana del lunes.
El ministro del Interior ucraniano, Arsén Avákov.informó que un oficial del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) murió este domingo y otros cinco efectivos resultaron heridos en la operación «antiterrorista» impulsada por Kiev contra los activistas prorrusos que se lleva a cabo en la ciudad de Slaviansk.
El sábado, hombres armados identificados como activistas prorrusos se apoderaron de estaciones de policía y edificios gubernamentales en Sloviansk y otras ciudades del este ucraniano, como Kramatorsk y Druzhkovka.
En marzo pasado, la península de Crimea se separó de Ucrania y fue anexada por Rusia, tras un referendo que fue realizado bajo la ocupación de fuerzas armadas que el gobierno ucraniano vinculó al Kremlim.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas celebró una sesión de emergencia la noche del domingo para discutir la escalada de la crisis en Ucrania, horas antes de un plazo límite que Kiev fijó a los separatistas prorrusos para que depongan las armas o enfrenten una «operación antiterrorista a gran escala»