Tras una estrecha victoria en el Senado de Florida el lunes, la «ley de seguridad pública Marjory Stoneman Douglas» –nombre de la secundaria atacada el 14 de febrero– fue aprobada con 67 votos a favor y 50 en contra en la Cámara de Representantes estadal.
La ley aún debe ser firmada por el gobernador Rick Scott para entrar en vigor, pero el funcionario republicano no ha dicho si se opondrá a su partido y vetará la medida.
Scott se ha manifestado opuesto a la propuesta del presidente Donald Trump de armar a algunos maestros para que supuestamente defiendan a los estudiantes si ocurre un tiroteo masivo.
El debate sobre el control de armas fue promovido por los estudiantes de Parkland, al norte de Florida, que lanzaron un día después del ataque el movimiento NeverAgain para exigir a los políticos que enfrenten el problema de los tiroteos masivos.
La ley 7026 eleva de 18 a 21 la edad mínima para comprar armas, prohíbe los «bump stocks» (unos dispositivos que permiten a los fusiles semiautomáticos disparar ráfagas) y busca intensificar la detección de problemas psicológicos que puedan derivar en un tiroteo masivo.
Pero incluye también un «programa de guardianes» voluntarios destinado a «prevenir o abatir incidentes de atacantes activos en instituciones educativas»
Esto significa que, tras un entrenamiento en el manejo de armas y ciertos estudios psicológicos, los empleados de la escuela que así lo deseen pueden armarse.
Los maestros que trabajan solamente en los salones de clase no pueden participar, pero están excluidos de esa prohibición aquellos maestros que a la vez sean militares o tengan experiencia como agentes de la ley.
«Entiendo la angustia que genera el programa de guardianes», dijo el republicano Chris Latvala al argumentar su voto a favor. Pero «si hay algún empleado en una escuela que quiere entrenarse para ayudar a proteger a los estudiantes, debería tener la oportunidad de hacerlo».
Los legisladores demócratas dijeron que la idea de armar a algunos maestros es una «píldora venenosa» dentro de una ley que en otros aspectos es un paso adelante en las restricciones a la venta de armas.
«La medida tenía cosas buenas pero luego ustedes la destruyeron con cualquiera sea esa cosa que ustedes llaman ley de guardianes», dijo el representante demócrata John Cortes, que votó en contra.
Los representantes afroestadounidenses advirtieron además que tener personal negro armado en las escuelas se prestará a reacciones racistas de parte de la policía, que acabará abatiendo al supuesto “guardián” en lugar de al atacante.
Pero otros demócratas decidieron votar por la medida tapándose la nariz, para al menos marcar algún avance.
La ley contiene «la píldora venenosa de poner más armas en las escuelas», dijo el demócrata Joseph Geller. «Pero hoy, como Sócrates, me tomaré la píldora».
En menos de dos años, Florida ha padecido tres notorios tiroteos masivos: uno en Orlando, donde murieron 49 personas, otro en el aeropuerto de Fort Lauderdale, donde fallecieron 5, y el último en Parkland.
La ley 7026 no prohíbe la compraventa de rifles semiautomáticos AR-15, algo que pidieron, llorando, los activistas contra las armas.
Con este rifle, Nikolas Cruz, de 19 años, cometió la matanza en Parkland. Llamadas «de asalto» por sus detractores, tales armas fueron usadas también en las masacres en Las Vegas (58 muertos), Sutherland Springs, Texas (26) y Newtown, Connecticut (26).
Agencia AFP