Julian Assange se enfrentará a un tribunal británico este martes en lo que su esposa dice que podría “ser la audiencia final para Julian”, mientras apela su extradición a Estados Unidos para enfrentar cargos de espionaje por publicar miles de documentos militares clasificados.
Assange, de 52 años, es solicitado por Estados Unidos que quiere juzgarlo por una filtración masiva de documentos que le acarreó cargos de espionaje. El periodista ha estado detenido en la prisión de Belmarsh, en Londres, desde 2019.
Los abogados de Julian Assange lanzaron el martes el que podría ser su último desafío legal en Reino Unido para evitar que el fundador del portal WikiLeaks sea enviado a Estados Unidos para enfrentar cargos de espionaje. La extradición fue aprobada por las autoridades británicas en 2022.
Stella Assange speaking this afternoon at London court hearing for Julian Assange: "What's at stake is the ability to publish the truth and expose crimes when they're committed by states…. the country that is trying to extradite him, plotted to murder him" #FreeAssange pic.twitter.com/5N3xKhFyS3
— WikiLeaks (@wikileaks) February 20, 2024
Assange y sus partidarios han argumentado durante mucho tiempo que su filtración de documentos militares clasificados debería estar protegida por la Primera Enmienda porque actuaba como periodista cuando publicó los documentos; Entre quienes han cuestionado los cargos se encuentran los consejos editoriales del New York Times y The Guardian, así como Amnistía Internacional.
En ese contexto, Julian Assange ha sido nominado al Nobel de la Paz 2024, informó este martes la diputada noruega que lo ha propuesto.
Marhaug calificó a Assange de «prisionero político» y destacó que debería ser homenajeado por su contribución a la paz y no perseguido.
¡Ser periodista no és un crimen!
El crimen es vulnerar los #DDHH como hace #EEUU cada día en todo el mundo.#FreeAssange #FreeAssangeNOW pic.twitter.com/AXWA4jsv44— Manel Márquez 🇵🇸 (@manelmarquez) February 20, 2024
Assange no compareció al Tribunal Superior de Londres este 20 de febrero por problemas de salud. Su esposa, Stella Assange, ya había advertido la semana pasada que su salud estaba «en deterioro, física y mentalmente». Una información que fue confirmada por su abogado, Edward Fitzgerald, y por una de los jueces del caso que le permitió a Assange salir de la prisión de Belmarsh, donde ha estado recluido hace cinco años.
La audiencia durará dos días frente a dos jueces superiores. Si tiene éxito, su caso irá a apelación total. Si pierde, el único obstáculo que queda para su extradición reside en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), donde ya tiene una solicitud presentada y que podría detener o aplazar su extradición.
«Estados Unidos está intentando condenar a Julian Assange en virtud de la Ley de Espionaje de 1917», declaró el fundador de la campaña Free Assange, John Rees. «Si se salen con la suya, habrán logrado redefinir el periodismo como espionaje», agregó.
Assange fue arrestado por la Policía británica en la Embajada de Ecuador en Londres, en la que permanecía escondido desde 2012 para evitar ser capturado por las autoridades de Suecia, que pedían su entrega por supuestos abusos sexuales. Dichas acusaciones luego fueron retiradas.
Sin embargo, desde el arresto en la embajada ecuatoriana comenzó la etapa legal más tortuosa de Assange. El 11 de abril de 2019, el asilo político que inicialmente le había otorgado Ecuador a Assange, fue revocado y Assange fue arrestado.
En junio de 2019, el Departamento de Justicia de Estados Unidos pidió formalmente a Reino Unido que lo extraditara a su territorio para enfrentar 18 cargos de conspiración y por violar las leyes de espionaje del país norteamericano.
Assange ha permanecido, desde entonces, en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh en espera de las audiencias de extradición.
Entre Noticias/Agencias