El presunto autor de la masacre de Orlando había estado bajo el radar del FBI quien ha informado que Mateen compró armas semanas antes del ataque.
«No era una persona estable», declaró la ex esposa al diario «The Washington Post» bajo condición de anonimato porque teme por su seguridad tras la masacre supuestamente cometida por su ex marido, identificado como el estadounidense de origen afgano Omar Mateen.
«Me golpeaba. Venía a casa y empezaba a golpearme porque la colada no estaba acabada o cosas así», afirmó la mujer, que conoció al sospechoso hace ocho años en internet y decidió mudarse a Florida para casarse con él en marzo de 2009.
Al principio de los pocos meses que estuvieron casados, «él parecía un ser humano normal» hasta que se tornó violento, indicó, al precisar que su marido no era muy religioso.
El FBI ha informado por su lado que Mateen compró armas semanas antes del ataque de Orlando y que investigó al atacante en dos ocasiones entre 2013 y 2014 por ser sospechoso de tener vinculación a grupos terroristas.
El agente del FBI, Ron Hopper, ha explicado que fue por comentarios a favor del grupo terrorista Estado Islámico en su cuenta en redes sociales, y en 2014 por aparentemente querer cometer un ataque suicida, aunque las autoridades consideraron la investigación «no concluyente» por falta de pruebas.
Según Hopper, en 2013 Mateen hizo «comentarios incendiarios a sus compañeros de trabajo que dejaron entrever su posible lazos con terroristas», lo que llevó a las autoridades a hacer un registros de sus antecedentes, revisar cámaras de videovigilancia y entrevistarlo hasta en dos ocasiones. El oficial confirmó que las investigaciones se cerraron por falta de pruebas y la imposibilidad de confirmar la veracidad de esos comentarios.
Posteriormente, en 2014, apareció en el radar de las autoridades federales por su presunta relación con Moner Mohammad Abusalha, un terrorista con nacionalidad estadounidense que murió en un ataque suicida en Siria. El FBI realizó una investigación y nuevamente entrevistó a Mateen, tras lo cual se determinó que «el contacto fue mínimo y no constituyó una amenaza en ese momento», de acuerdo con Hopper.
Según la ex esposa, el presunto asesino no dio nunca señales de haberse radicalizado, poseía una pistola de bajo calibre y trabajaba como guardia en un centro de delincuentes juveniles.
De acuerdo con la mujer, la familia de Mateen procedía de Afganistán, pero él nació en Nueva York y se mudó posteriormente a Florida con sus familiares.
El presunto autor de la matanza fue identificado como Omar Mateen, según confirmó el congresista Alan Grayson, que visitó el lugar de la tragedia.
Poco se sabe de Mateen, salvo que nació en 1968, era un estadounidense de origen afgano, residía en una localidad cercana a Orlando y falleció también en la discoteca Pulse.
Mateen, que portaba un fusil de asalto y una pistola, murió en un enfrentamiento con la Policía, que entró al local para liberar a los rehenes que él había tomado después de disparar indiscriminadamente.
Entre Noticias/Agencias