«Si se pudiera cruzar al hombre con el gato, sería una gran mejora para el hombre«.
(Mark Twain)
Cuando los humanos llegan a sus casas, esperan que sus perros corran a la puerta moviéndoles la cola para recibirlos, mientras que los gatos parecen a menudo indiferentes.
Pero de acuerdo con un nuevo estudio, ese comportamiento es sólo una gran actuación de los felinos. Investigadores de la Universidad Estatal de Oregon, han llegado a la conclusión de que los gatos prefieren de hecho la compañía de los humanos, antes incluso que el alimento, según se observó en el experimento.
El investigador principal, Kristyn Vitale Shreve no estaba contento con el hecho de que muchos trabajos científicos se refieren a los gatos como difíciles de entrenar, obstinados, egoístas y despreocupados.
Para comprobar si lo anterior era cierto, los investigadores llevaron a cabo un experimento con 55 gatos: 23 eran animales domésticos y 22 pertenecientes a los refugios de animales.
Cada gato fue puesto en confinamiento solitario durante dos horas y media, mientras los investigadores preparaban los alimentos preferidos de cada uno de ellos, rodeándoles luego con diferentes juguetes, hierba para gatos e incluso la compañía de algún otro gato.
La conclusión del estudio contradice, según los investigadores, la idea de que los gatos no se han domesticado el tiempo suficiente para mostrar preferencia hacia la interacción humana:
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