Leopoldo López, líder de Voluntad Popular.
Venezuela ha denunciado «la flagrante violación integral de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas por parte del Gobierno del Reino de España, al facilitar, con notable complicidad, la fuga del terrorista Leopoldo López», ha publicado este 25 de octubre su cuenta de Twitter el canciller venezolano, Jorge Arreaza, precisando que las correspondientes investigaciones están en curso.
«La inédita y continua violación del contrato internacional que rige las relaciones civilizadas entre los Estados, se remonta, al menos, al año 2017 y ha sido protagonizada en territorio venezolano directamente por el embajador español acreditado en Caracas», reza el comunicado adjunto a la publicación.
El documento recuerda que el embajador español, Jesús Silva, fue expulsado de Venezuela el 25 de enero de 2018 «como consecuencia de reiteradas intromisiones en asuntos internos», pero en abril del mismo año su regreso a Caracas fue acordado con las autoridades españolas, «bajo un renovado compromiso de respeto a las leyes venezolanas e internacionales».
«Muy por el contrario, la práctica diplomática sesgada del representante español se hizo aún más notable, al punto de cobijar bajo una figura inexistente y antijurídica, en la propia residencia de España, a un prófugo condenado por la Justicia venezolana, responsable, entre otros delitos, de la muerte y lesiones de centenares de venezolanos en el año 2014», denuncia Caracas.
La declaración de las autoridades venezolanas se produce después de que el Ministerio de Exteriores español confirmara este domingo que el líder de Voluntad Popular, Leopoldo López, llegó a Madrid tras abandonar la residencia del embajador de España en Caracas, donde se encontraba desde abril del 2019.
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